Este proyecto se centra en apoyar la integración de enfoques de evaluación de riesgos en la legislación europea sobre aguas para proteger tanto el medio ambiente como la salud humana. A medida que evolucionan las directivas de la UE—como la Directiva sobre Tratamiento de Aguas Residuales Urbanas (UWWTD), la Directiva sobre Agua Potable (DWD), el Reglamento sobre Reutilización del Agua, la Directiva Marco del Agua (DMA) y la Directiva sobre Emisiones Industriales (IED)—se hace cada vez más hincapié en comprender y mitigar los riesgos que plantean los microcontaminantes como los productos farmacéuticos, los pesticidas y los microplásticos. Estas sustancias, cuando se acumulan en las masas de agua, plantean retos complejos que exigen una actuación coordinada entre sectores y fronteras.
El objetivo es promover un enfoque más holístico e integrado de la gestión del agua mejorando la identificación de las fuentes de contaminación, reforzando las prácticas de evaluación de riesgos ambientales y fomentando el intercambio de conocimientos entre los Estados miembros de la UE. Esto incluye el seguimiento de las presiones de la industria, la agricultura y las plantas de tratamiento de aguas residuales, y el uso de los conocimientos para apoyar los procedimientos de concesión de permisos e informar sobre una mejor aplicación de la normativa vigente.
El objetivo de este proyecto es mejorar la gestión del agua de forma más holística e integrada.
Un objetivo clave es desarrollar metodologías para evaluar los daños ambientales, en particular para determinar cuándo un daño puede calificarse de “daño sustancial” con arreglo a la Directiva sobre delitos ambientales y la Directiva sobre responsabilidad ambiental. Para ello es necesario crear criterios técnicos comunes que puedan compartirse en todos los Estados miembros a fin de apoyar una aplicación coherente y la claridad jurídica.
El proyecto también pretende contribuir a la transición hacia una economía circular identificando las mejores prácticas en la reutilización del agua, especialmente en entornos industriales y agrícolas. Basándose en proyectos anteriores de IMPEL como WiNE y CAED, la iniciativa se basa en los conocimientos y herramientas existentes para avanzar en respuestas eficaces y coordinadas a la contaminación del agua y la gestión de los recursos.
En última instancia, se espera que los resultados de este proyecto mejoren la aplicación de la legislación de la UE en materia de aguas, contribuyan a los procesos de concesión de permisos medioambientales y respalden objetivos más amplios como el Pacto Verde de la UE, el Plan de Acción para la Contaminación Cero y las estrategias de mitigación del cambio climático. A través de una mejor evaluación de riesgos y daños, el proyecto ofrece valiosas aportaciones para mejorar la calidad del agua, proteger la salud pública y promover el uso sostenible del agua en toda Europa.
Los estudios del proyecto se llevarán a cabo con 3 paquetes de trabajo diferentes:
1. WiNE-Aguas residuales en el medio natural
Proyecto WiNE continuará dentro de Work Package 1 of WRAP. Se evaluará cómo los índices de circularidad desarrollados hasta la fecha apoyan los objetivos de la normativa de la UE sobre reutilización del agua y ayudan a promover diversas estrategias de reutilización, tal y como se recoge en la refundición de la Directiva sobre aguas residuales urbanas (91/271/CEE). También examinará cómo se está aplicando en la práctica el Reglamento (UE) 2020/741 sobre reutilización del agua e identificará métodos eficaces de evaluación de riesgos. Los estudios se publicarán en página del proyecto WiNE.
2. CARA -Zonas de Captación y Evaluación de Riesgos :
Dos visitas in situ están previstas durante el proyecto para comprender mejor cómo abordar la complejidad de las cuencas hidrográficas y la acumulación potencial de microcontaminantes. Estas visitas también explorarán las herramientas disponibles para la detección local y remota.
A partir de los resultados, se elaborará un documento de orientación y herramientas prácticas para apoyar la evaluación de riesgos de los recursos hídricos. La atención se centrará en las cuencas hidrográficas, en particular:
- Zonas en las que puedan acumularse microcontaminantes, por ejemplo, cerca de los vertidos de aguas residuales
- Zonas de captación utilizadas para la producción de biocombustibles
- Zonas de captación utilizadas para extraer agua con fines potables o de riego .
3. WDKA-Evaluación clave de los daños causados por el agua
Están previstas dos visitas in situ para probar la metodología ya desarrollada por la “Red Nacional IMPEL” portuguesa a incidentes reales de contaminación del agua (por ejemplo, vertidos de aguas residuales de instalaciones de DEI) y para comprender las dificultades y las formas de superarlas. Este trabajo también permitirá enlazar con el proyecto WiNE, concretamente con el índice de circularidad y el uso del listas de control elaboradas en el antiguo proyecto “Enfoque integrado del agua” para los responsables de los permisos de vertido de aguas residuales.
Se elaborará un documento de orientación y herramientas para medir los daños sustanciales al agua e identificar posibles ámbitos de aplicación en el marco de la DCE y la DEE.
Siga esta página para conocer las actualizaciones y los principales avances a lo largo del proyecto.