Residuos y TFS

A lo largo de varios años y múltiples proyectos IMPEL, los iniciadores del proyecto han detectado que varios inspectores de SFT han realizado conjuntamente miles de inspecciones en el ámbito de los SFT. Todas estas inspecciones se han traducido en un amplio conocimiento de la legislación relacionada con las inspecciones físicas de los traslados transfronterizos de residuos. Sin embargo, a pesar de varios cambios legislativos y revisiones de la legislación, sigue faltando una conexión entre los legisladores y los inspectores sobre el terreno cuando se trata de algunos de los detalles de la legislación. Estos "detalles" podrían estar relacionados con ciertas intenciones de la legislación, pero debido a la desconexión provocada por las largas líneas de comunicación y las numerosas agencias entre los legisladores a nivel de la UE y los inspectores de SFT, y al nivel en el que estos "detalles" podrían no figurar entre las prioridades de cada país de cara a la Comisión, ya que son sólo eso, "detalles".

Gran parte del trabajo del grupo IMPEL Waste & TFS se centra en el cumplimiento de la normativa en materia de movimientos transfronterizos de residuos. Dado que un gran volumen de los traslados de residuos se destina a países no europeos, es importante mantener buenos contactos con las autoridades de estos países de destino. La mayoría de los miembros de IMPEL tienen un contacto mínimo con estos países lejanos. Los daños medioambientales, como el vertido de residuos electrónicos en África y el vertido de plásticos en Asia, son por desgracia bastante comunes y vemos que se produce un elevado número de tráficos ilícitos estructurales. El mercado es dinámico y, como consecuencia de recientes acontecimientos políticos como la prohibición de las importaciones en China, las autoridades europeas se esfuerzan por mantenerse al día de la situación en la práctica. En estos casos, la colaboración internacional es esencial.

El aumento de los residuos plásticos está creciendo en todo el mundo a lo largo de los años. El hecho de que China aceptara 7 millones de toneladas de residuos plásticos para su recuperación antes de 2018 provocó una fuerte sacudida en el comercio mundial de residuos plásticos. Este choque provocó que los países asiáticos vecinos recibieran los residuos desplazados. Aunque la información de que disponemos sobre el destino final de estos flujos de residuos es limitada, lo cierto es que se necesita más información.

El proyecto de Gestión de Residuos y Economía Circular pretende basarse en los resultados y productos de proyectos anteriores sobre vertederos. Avanzando a través de los pasos de la jerarquía de residuos, con el fin de promover la ecoinnovación y la economía circular, al tiempo que se crean unas condiciones equitativas y se garantiza una comprensión común de los puntos clave de la Directiva Marco de Residuos en el proceso de autorización y excepción.

De acuerdo con la directiva RAEE 2012/19/UE (respectivamente la ley nacional implementada: por ejemplo, ElektroG en Alemania) cada productor de aparatos eléctricos y electrónicos tiene que estar registrado en el registro nacional (Alemania: registro stiftung elektro-altgeräte) para garantizar que cumplirán con sus responsabilidades, cuando sus productos vendidos se conviertan en residuos (por ejemplo, RAEE).

Muchos proyectos y actividades del Equipo de Expertos en Residuos y SFT se basan en el Reglamento Europeo (CE) Nº 1013/2006 sobre el traslado de residuos (RTR). Al tratarse de un Reglamento e incluir un aspecto transfronterizo, es de gran importancia contar con una red europea activa y práctica de inspectores y reguladores que se reúnan periódicamente para intercambiar experiencias prácticas. No sólo los inspectores de medio ambiente, sino también los funcionarios de aduanas y policía y la judicatura. Los proyectos IMPEL-TFS en curso siguen mostrando la necesidad de establecer y, sobre todo, mantener una colaboración buena y práctica entre los Estados miembros, los terceros países y las organizaciones internacionales pertinentes.

En 2017, el 65 % de los buques de todo el mundo se vendieron a astilleros de varada del sur de Asia para su desmantelamiento (por ejemplo, India, Pakistán y Bangladés), lo que se traduce en importantes repercusiones medioambientales y sanitarias, sobre todo si se tiene en cuenta que esos buques representaron el 80 % del tonelaje bruto de todos los buques desmantelados varados en 2017. La exportación ilegal de buques para su varada en el sur de Asia sigue produciéndose, así como la elusión de la normativa sobre traslado de residuos y reciclaje de buques. Bangladesh, India y Pakistán suman casi el 90% del tonelaje bruto desguazado en todo el mundo en 2019, y algunos de estos buques han sido exportados ilegalmente desde Europa, o "legalmente" eludiendo la normativa.

Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) son uno de los flujos de residuos de más rápido crecimiento en la UE, con unos 9 millones de toneladas generadas en 2005, y se espera que aumenten a más de 12 millones de toneladas en 2020. Los RAEE contienen una compleja mezcla de materiales y componentes, que además son en parte peligrosos. Si no se gestionan adecuadamente, los RAEE pueden causar graves problemas medioambientales y sanitarios. Además, la producción de aparatos electrónicos requiere el uso de recursos escasos y caros.

SPIDER WEB está cofinanciado por la Unión Europea y la República Federal de Alemania en virtud de un acuerdo de subvención con la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GmbH) dentro del Proyecto IPA/2017 de lucha contra la delincuencia grave en los Balcanes Occidentales. Para facilitar su consulta, consulte a continuación las actualizaciones de la WEB SPIDER:

El objetivo de estos proyectos era mejorar la aplicación en Europa de la normativa sobre traslados de residuos establecida en el Reglamento 259/93 de la UE y en el Convenio de Basilea, mediante una mayor cooperación entre las autoridades encargadas de hacer cumplir la normativa.

El objetivo del proyecto era aumentar la cooperación y el intercambio de información sobre la verificación de los destinos de los residuos en el marco del Reglamento 259/93 de la UE (Reglamento sobre el traslado de residuos) relativo a la vigilancia y el control de los traslados de residuos, mediante la realización de inspecciones en los países participantes y el seguimiento de los flujos de residuos hasta su destino final.

Viabilidad y aplicabilidad de la propuesta de refundición de los RAEE (2009) IMPEL elaboró anteriormente una lista de comprobación para examinar la viabilidad y aplicabilidad (P&E) de la legislación ambiental propuesta y vigente. En diciembre de 2008, la Comisión adoptó una propuesta de refundición de la Directiva RAEE. El presente informe describe una evaluación de las cuestiones de viabilidad y aplicabilidad derivadas de la propuesta basada en la lista de control IMPEL. El informe presenta una síntesis de los resultados de las respuestas al cuestionario y de los debates de los talleres y pone de relieve una amplia gama de cuestiones de P&E.

En febrero de 2008, IMPEL firmó un Memorando de Entendimiento (MoU) con la Secretaría del Convenio de Basilea (SBC). En el marco de este MoU, IMPEL TFS y la SBC acordaron colaborar en el componente 4 del proyecto E-wastes to Africa de la SBC. Este proyecto, lanzado en 2009, tiene como objetivo equipar a África Occidental y a otros países africanos para que puedan hacer frente al creciente problema de la importación de residuos electrónicos procedentes de países industrializados y proteger así la salud de los ciudadanos. El proyecto tiene 4 componentes:

Los miembros del Comité Directivo de IMPEL TFS asisten anualmente a los talleres de la Red Asiática para la Prevención de los Movimientos Transfronterizos Ilegales de Residuos Peligrosos y de la Red Regional para la Aplicación de la Legislación sobre Sustancias Químicas y Residuos (REN).

A la vista de los problemáticos flujos de residuos en todo el mundo, especialmente de residuos electrónicos, vehículos al final de su vida útil y sus componentes desde Europa a África, los expertos coincidieron en la necesidad de centrarse más eficazmente en las fuentes de flujos de residuos ilegales y en las instalaciones "previas" donde se recogen, almacenan y/o tratan dichos residuos antes de su exportación.

Este proyecto IMPEL explora la utilidad de la metodología Doing the Right Thing (DTRT) para las inspecciones de traslados de residuos. El objetivo es desarrollar una herramienta práctica, basada en el Libro de Orientación DTRT, que pueda ayudar a mejorar la organización de las inspecciones de traslados de residuos por parte de las autoridades competentes de los países miembros de IMPEL. Tres autoridades competentes de diferentes países miembros de la IMPEL aplicarán cada una el Libro de Orientación DTRT sobre inspecciones de traslados de residuos y probarán cómo DTRT puede apoyar la organización de dichas inspecciones. Por organización se entienden todos los pasos de planificación, ejecución y evaluación de las inspecciones, tal y como se describen en el Ciclo de Inspección Medioambiental de DTRT. Las pruebas se establecerán teniendo en cuenta las conclusiones y recomendaciones del estudio sobre los requisitos específicos de inspección de los traslados de residuos. Los resultados de la fase de pruebas se debatirán y utilizarán para desarrollar una herramienta de orientación basada en el Libro de Orientación DTRT, que sea adecuada para el ámbito específico de la organización de inspecciones de traslados de residuos.

La cooperación y la armonización internacionales son muy importantes cuando se trata de hacer cumplir el Reglamento europeo sobre el traslado de residuos (RTR) (CE) nº 1013/2006, tal como establece su artículo 50. Los proyectos IMPEL-TFS (traslados transfronterizos de residuos) anteriores y en curso demostraron que es esencial trabajar juntos como autoridades competentes. El déficit de aplicación de la normativa de la UE sobre traslados de residuos sigue siendo grave. Para mejorar la colaboración y la armonización de la aplicación de la normativa, es necesario que las autoridades europeas competentes mantengan contactos frecuentes. Este proyecto facilita el intercambio de información y experiencias, estudios de casos, debates sobre interpretaciones y enfoques de inspección entre los Puntos Nacionales de Contacto (PNC) de TFS.

El proyecto de Acciones de Cumplimiento se puso en marcha por las siguientes razones: Las autoridades competentes expresaron la necesidad de contar con un marco de proyecto formalizado para integrar las inspecciones de aplicación en sus propios países; La cooperación internacional es esencial para abordar los problemas medioambientales internacionales; y La red de responsables de la aplicación sobre el terreno debe mantenerse y ampliarse a todos los Estados miembros para garantizar un régimen de inspección eficaz.

El nuevo Art. 50 (2a) del Reglamento 1013/2006 relativo al traslado de residuos (RTR) establece que, a más tardar el 1 de enero de 2017, los Estados miembros de la UE garantizarán el establecimiento de uno o varios planes de inspección (PI) en todo su territorio geográfico. Estos planes se refieren a las inspecciones previstas en el art. 50(2) WSR, es decir, de establecimientos, empresas, intermediarios y distribuidores de conformidad con el Art. 34 de la Directiva 2008/98/CE, así como de los traslados de residuos y de su valorización o eliminación. Durante la conferencia IMPEL-TFS de 2014, los participantes expresaron la necesidad de desarrollar un formato/plantilla estándar o, al menos, una directriz para un plan de inspección en consonancia con los requisitos del WSR, lo que debería hacer que los PI también fueran más comparables. También apoyaron el intercambio de planes, experiencias y prioridades existentes.

El déficit de cumplimiento del Convenio de Basilea y su aplicación europea, el Reglamento europeo sobre el traslado de residuos (1013/2006), es muy grave. (1013/2006) o "RTR" es muy grave. Las cifras indican que alrededor del 20% de todos los traslados de residuos infringen la normativa. La Directiva 2008/99 de la UE relativa a la protección del medio ambiente mediante el Derecho penal obliga a los Estados miembros a aplicar también el RTR mediante el Derecho penal.